Estas bolitas verdiblancas pueden ser una atractiva guarnición para los niños reacios a comer verduras que aparecen en el plato «explícitamente», ya que las espinacas se enmascaran en estas albóndigas con queso. No quedarían mal tampoco estas bolas en un surtido de aperitivos fríos para una velada veraniega.
Bolitas de espinacas y queso
Estas Bolitas de espinacas y queso son una adicción. Están buenísimas, sirven para picoteo y hasta los niños no dejarán ni una en el plato
Imagen: Gingerandtomato