Esta es una receta de esas que se disfrutan porque se comen con las manos. Con el pulgar y el índice vamos disfrutando caracol por caracol. La salsita ya se sabe cómo hay que tomarla, ¡haciendo barquitos! No lo dudéis, preparad una tapita este finde para aquellos niños amantes de los caracoles.
Si los caracoles son de cultivo, no necesitarán tanto lavado como los silvestres, por tanto el paso de mantenerlos en harina nos lo podemos ahorrar y directamente los lavamos con agua, sal y vinagre.
Caracoles en salsa de almendras
Si te gustan los caracoles, esta receta de Caracoles en salsa de almendras te va a encantar. Mojarás la salsa una y otra vez de lo rica que está
Imagen: Laforquetaelx