Recurrimos al crumble cuando necesitamos un postre sencillo y que se haga en poco tiempo. Ya sabéis que se trata de trocear la fruta y mezclarla con esa masa de mantequilla, azúcar y harina y hornear. Este postre británico es una estupenda forma de que los niños coman fruta. Sobre todo en verano, podemos hacerlo más atractivo si lo servimos acompañado de una bola de helado, nata montada o unas natillas frías.
Crumble de melón y frambuesa
Si tienes poco tiempo para preparar un postre pero quieres sorprender, este Crumble de melón y frambuesa es perfecto
Receta inspirada en la imagen de LocalKitchen