Si te gustan los postres rápidos aquí tienes uno que podrás hacer en un tiempo record. Con las láminas de hojaldre que podemos tener a nuestro alcance podremos realizar unas maravillosas caracolas con un relleno de manzanas caramelizadas. Tan solo tienes que cocer esta deliciosa fruta y colocarlo como relleno haciendo unos sencillos pasos. ¡Anímate! son unos bocados exquisitos.
Si te gustan los postres hechos con hojaldre puedes consultar nuestras ‘palmeritas con yema tostada’ o ‘cañitas rellenas de crema’.
- Una lámina de hojaldre pequeña
- 2 manzanas rojas
- 25 g de mantequilla
- 3 cucharadas de azúcar
- Media cucharadita de canela en polvo
- Un puñado generoso de pasas pequeñas
- Comenzamos lavando y secando las manzanas. Con un cuchillo las pelaremos y las dividiremos en dos partes. Quitamos la parte interna de las semillas y las cortamos en gajitos finos.
- En una sartén un cazuela pequeña echamos los 25 g de mantequilla y lo ponemos a calentar a fuego suave para que se derrita. A continuación añadimos la manzana cortada, las tres cucharadas de azúcar y la media cucharadita de canela en polvo.
- Lo dejamos cocer a fuego suave y sin dejar de remover de vez en cuando. Hay que conseguir que alcance un tono dorado y tostado.
- Una vez cocidas las trituraremos con una batidora de mano para que se hagan puré.
- Ponemos a calentar el horno a 180°.Extendemos la lámina de hojaldre y esparcimos la compota de manzana por toda su superficie. Esparcimos por encima las pasas.
- Desde un extremo del hojaldre comenzaremos a enrollarlo, dando varias vueltas para ir formando un rollo.
- Con un cuchillo afilado vamos cortando pequeñas rodajas. En una bandeja que pueda ir al horno colocaremos papel de horno y colocaremos las caracolas.
- Dejaremos que se horneen unos 12 minutos aproximadamente.
Sé el primero en comentar