La receta de conejo al horno con patatas es una receta tradicional, sencilla y sin complicaciones. Esta receta se puede preparar con el conejo partido por la mitad o en trozos. En el caso de usar el conejo solo partido por la mitad necesitaréis un poco más de tiempo de horneado. La carne de conejo es una carne blanca con muy poca grasa y por tanto con poco aporte calórico, por lo que es ideal para introducirla en nuestra dieta semanal.
Aunque con el calor apetece poco encender el horno, también es cierto que las recetas al horno suelen ser sencillas y te permiten hacer otras cosas mientras la receta se va elaborando prácticamente sola.
Conejo al horno con patatas
Disfruta de una receta rica con un gran aporte de proteínas y pocas grasas
Autor: Barbara G
Cocina: española
Tipo de receta: Carnes
Raciones: 2-3
Tiempo de preparación:
Tiempo de cocinado:
Tiempo total:
Ingredientes
- ½ conejo troceado
- 2 patatas
- aceite de oliva
- sal
- pimienta
- hierbas provenzales
- 170 gr. de vino blanco
Preparación
- Echar un chorro de aceite en el recipiente de horno donde vayamos a cocinar el conejo.
- Cortar las patatas en rodajas finas y colocarlas cubriendo el fondo del recipiente.
- Salpimentar al gusto y echar un chorrito más de aceite.
- Introducir en el horno precalentado a 210ºC y hornear durante unos 10 minutos aproximadamente.
- Mientras se empiezan a hacer las patatas, cortar el conejo por la mitad o en trozos, salpimentar y espolvorear con las hierbas provenzales.
- Pasados los 10 minutos de cocinado de las patatas, colocar los trozos de conejo sobre las patatas.
- A continuación echar un chorrito más de aceite y la mitad del vino blanco.
- Bajar el horno a 180ºC e introducir la bandeja con el conejo y las patatas. Hornear durante 15-20 minutos.
- Pasado ese tiempo de cocción dar la vuelta a los trozos de conejo, rociar con el resto de vino que nos queda y acabar el horneado durante otros 15-20 minutos.
Notas
Cada horno es un mundo y nadie mejor que vosotros conoce vuestro propio horno. Así que vigilar los tiempos de cocinado, el conejo debe quedar ligeramente dorado, pero no un exceso para que no quede seco. En caso necesario podéis reducir el tiempo de horneado o bajar la temperatura de vuestro horno.
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