Le pondremos calabacín, zanahoria y un poco de manzana que le dará un toque especial.
Podéis servirlo con perejil picado, con picatostes para aprovechar el pan, con queso rallado… Con ese toque final podéis personalizarlo y adaptarlo a vuestros gustos o a las necesidades de los comensales.
- 750 g de calabacín (peso una vez pelados)
- 90 g de zanahoria pelada
- 50 g de manzana pelada
- Un chorrito de aceite de oliva
- 1 cucharadita de hierbas aromáticas secas
- Sal
- Agua
- Perejil fresco para servir (opcional)
- Preparamos la verdura. Lavamos y pelamos el calabacín. Lavamos y pelamos la zanahoria. Descorazonamos y pelamos la manzana,.
- Troceamos estos ingredientes y los ponemos en una cacerola junto a un chorrito de aceite de oliva, la cucharadita de hierbas aromáticas y la sal.
- Rehogamos unos 10 minutos, removiendo, y a fuego medio para que nos nos queme.
- Añadimos el agua. No tiene que cubrir toda la verdura, unos 700 mililitros serán suficientes.
- Cocinamos durante unos 30 minutos, hasta que la verdura esté blandita.
- Ponemos todo en el vaso de un robot de cocina y trituramos. Se puede utilizar también una batidora sencilla.
- Servimos con perejil fresco.
Más información – ¿Cómo aprovechar el pan duro del día anterior?
Sé el primero en comentar