Lo bueno de este tipo de dulces es que los niños os pueden ayudar a prepararlos. Se pueden encargar de integrar la masa, os ayudarán a extenderla y se divertirán muchísimo si los cortes los hacéis con un cortapastas.
Una vez que pongáis las galletas en el horno, no os despistéis. En solo 10 o 15 minutos suelen estar listas.
Os dejo el enlace a otras galletas: las de miel y canela, las de frutos secos olas chiquititas de chocolate.
- 180 g de mantequilla
- 100 g de azúcar
- 1 yema de huevo
- 300 g de harina (270+30)
- 15 g de cacao en polvo
- Un poco de clara de huevo
- Ponemos en un bol bol 180g de mantequilla y el azúcar. Lo dejamos unos minutos a temperatura ambiente.
- Pasado un tiempo, añadimos la yema de huevo.
- Mezclamos con un tenedor.
- Reservamos 30 gramos de harina. En un bol amplio, mezclamos los 270 g de harina con la mezcla de mantequilla, azúcar y huevo.
- Terminaremos mezclando todo bien con las manos, hasta formar una bola de masa.
- Dividimos esa bola en dos porciones. A una porción le añadimos el cacao en polvo. A la otra porción le incorporamos los 30 gramos de harina que teníamos reservados.
- Integramos bien.
- Estiramos ambas porciones de masa con la ayuda de un rodillo y utilizando dos láminas de papel de horno.
- Pintamos con la clara de huevo una de las planchas de masa.
- Colocamos encima la otra plancha, utilizando el papel de horno para que nos sea más fácil.
- Presionamos con el rodillo ambas masas superpuestas.
- Cortamos las que serán las galletitas. Yo las he hecho en forma de diamante.
- Las vamos poniendo en una bandeja sobre papel de horno, dejando separación entre ellas.
Más información – Galletas de miel y canela, Galletas crujientes de claras y frutos secos, Galletas de chocolate
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