La pintada, también conocida como gallina de Guinea, es un ave con un elegante plumaje. Gastronómicamente hablando, el sabor de su carne es similar al del pollo.
Es quizás una carne más delicada que, según cómo la cocinemos, puede quedar seca. Por eso, una buena opción para cocinarla es preparar un guiso.
A mí el otro día me sobraron judías verdes y las he aprovechado aquí poniéndolas ya cocidas. Si las tenéis en crudo podéis cocerlas previamente o añadirlas al guiso antes, para que se cocinen con la carne.
- Un chorrito de aceite de oliva virgen extra
- 900 g de faraona, en trozos
- 2 cebollas pequeñas o 1 cebolla grande
- 1 tomate rama maduro
- Sal
- Pimienta
- Hierbas aromáticas
- 500 g de judías verdes ya cocidas
- Ponemos un chorrito de aceite de oliva en nuestra cacerola o cocotte. Sellamos la carne por ambas caras, dejando que se dore.
- Troceamos la cebolla y el tomate y ponemos sobre la carne.
- Mezclamos y cubrimos nuestro guiso con la tapadera.
- Dejamos cocinar unos 50 minutos, fuego medio-bajo. A continuación echamos hierbas aromáticas secas y las judías verdes ya cocidas en mi caso.
- Seguimos con la cocción unos 15 minutos más.
- Si nuestras judías verdes están sin cocer podemos añadirlas al guiso al principio, cuando añadimos la cebolla y el tomate.
- Ponemos más sal y pimienta si lo consideramos necesario.
- Servimos inmediatamente.
Más información – Judías verdes en olla exprés
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