Empieza el buen tiempo y con él la época de helados. Podemos elaborarlos en casa, con ingredientes y aromas naturales, si contamos con una heladera. Algunas no cuestan demasiado y son una buena inversión si os gusta elaborar postres caseros.
Hoy os muestro cómo preparar un helado de nata con ligero sabor a vainilla. A los niños les encanta.
Os dejo también algunas ideas para vuestros helados caseros: Cómo hacer helados en casa.
- 300 g de leche
- 300 g de nata líquida
- 8 yemas de huevo
- 170 g de azúcar
- 600 g de nata líquida para montar
- Vainilla (las semillas de un trocito de vaina)
- Ponemos en un cazo 300 g de leche y 300 g de nata líquida. Lo calentamos a fuego medio hasta que esté muy caliente pero sin que llegue a hervir, removiendo de vez en cuando. Retiramos del fuego y reservamos.
- Ponemos las yemas de huevo y el azúcar en un bol amplio o en el bol de un robot de cocina.
- Lo batimos durante unos segundos, hasta que esté todo bien integrado.
- Seguimos mezclando a mano o en velocidad 2, si utilizamos una amasadora, y echamos la mezcla que hemos preparado anteriormente, de nata y leche.
- Ponemos ahora toda esa mezcla en un cazo amplio y lo ponemos al fuego, a fuego medio, hasta que esté bien caliente pero sin que llegue a hervir.
- Ponemos esa mezcla ya caliente en el bol grande.
- Incorporamos los 600 g de nata líquida.
- Incorporamos también la vainilla (las semillas de un trozo de vaina) y removemos.
- Ponemos la mezcla en un tupper y dejamos enfriar en el frigorífico al menos durante 8 horas.
- Pasado ese tiempo ponemos el helado en nuestra heladera. Es mejor que lo hagamos en varias tandas ya que es bastante cantidad. Seguimos las indicaciones de nuestra máquina hasta que el helado quede con la consistencia deseada.
- Servimos en cuencos o lo conservamos en un tupper en el congelador.
Más información – Cómo hacer helados en casa
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