Quizás los huevos duros, más por el olor que despiden al cocerlos que por su sabor, no sean santos de devoción de los niños. Los huevos cocidos son una manera muy sana y cómoda de tomar huevo, ya que están libres de grasas y una vez cocidos y sin pelar se conservan varios días en la nevera.
Si a los niños les gustan los huevos duros o has cocido demasiados huevos y no sabes qué hacer con ellos, ahí va una receta para disfrutarlos. Para servirlos, podemos añadirles alguna salsa de tomate o de queso.
Huevos rebozados con bechamel
Esta receta de Huevos rebozados con bechamel es una forma muy rica y apetecible de comer huevos cocidos en casa
Imagen: Precocidosgorena