Ingredientes
- 375 g de tomates de pera en conserva (les retiramos las pepitas)
- 25 g de pimiento rojo
- 20 g de cebolla morada o cebolleta dulce
- 1 diente de ajo
- 20 g de azúcar moreno
- 10 g de miel
- 20 g de vinagre de vino blanco
- ¼ cucharada de sal fina
- ¼ cucharada de pimentón dulce
- ¼ cucharada de mostaza en polvo
- Pizca de pimienta molida
- 1 clavo de olor
- ½ palo de canela
¿A qué niño no le gusta el ketchup? Probablemente sean pocos los que no hayan caído sucumbidos al encanto de esta salsa… así que ¡¡mucho mejor si lo preparamos de forma casera!! En realidad no se trata de otra cosa que de una salsa de tomate con un buen aliño de especias y aderezos. Así que la clave estará en utilizar ingredientes de primera calidad.
Al ser casero debemos tener en mente que no nos durará como los industriales, así que mejor hacer menos cantidad y conservarlo en botes herméticos unos 4-5 días en la nevera, o bien, esterilizar tarros de cristal y pasarlos por un baño maría para que así se les haga el vacío. Sin embargo, con esta última técnica, nuestra recomendación es seguir conservándolos en la nevera hasta un mes como máximo.
Preparación
- Picamos los tomates, el ajo y el pimiento. Lo ponemos en una olla y cocinamos a fuego medio-bajo durante 15 minutos aproximadamente. Si hubiera demasiada agua (que hayan soltado los tomates) dejamos cocinar destapado unos minutos más hasta que espese.
- Trituramos con ayuda de una batidora durante 1 minuto o hasta que la textura sea homogénea.
- Añadimos todas las especias, la sal y el clavo pinchado en el palo de canela. Incorporamos el vinagre, la miel, el azúcar moreno y cocinamos nuevamente a fuego muy lento 15 minutos, removiendo de vez en cuando.
- Retiramos el palo de canela con el clavo y, si queremos, podemos volver a batir con la batidora.
Si queremos, podemos pasar el ketchup por un colador de malla fina para que la textura sea perfecta.
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