Con estos calores apetece poco cocinar y no apetece nada encender el horno. Por eso os proponemos esta lasaña alternativa, una lasaña de verano, con carne picada y huevo duro.
Lo que tiene de especial es que no va horneada. Por ese motivo tenemos montar la lasaña con todos los ingredientes cocinados.
La bechamel la podéis preparar en casa (yo he utilizado 40 gramos de mantequilla, 40 gramos de harina y 600 g de leche) o comprarla ya hecha si queréis tener la comida lista en menos tiempo.
- 235 g de carne picada
- Un chorrito de aceite
- Sal
- Hierbas aromáticas
- Unas 9 hojas de lasaña
- Agua para la cocción de la pasta
- 3 huevos duros
- 2 lonchas de jamón cocido
- Bechamel
- Pan tostado con hierbas aromáticas y aceite de oliva
- Ponemos a cocer las láminas de lasaña en abundante agua salada. Hay que cocinarlas bien porque, en este caso, no se van a acabar de hacer en el horno.
- Preparamos la carne picada, rehogándola en la sartén con un poquito de aceite, sal y hierbas aromáticas.
- Quedará así.
- Pelamos y troceamos los huevos duros y sacamos del frigorífico el jamón cocido.
- Cuando la pasta esté bien cocida la sacamos del agua de cocción y la vamos colocando sobre papel de horno o sobre un paño limpio.
- Montamos la lasaña poniendo en la base de una fuente grande un poco de bechamel. Sobre la bechamel ponemos unas láminas de lasaña. Sobre ella distribuimos la mitad de la carne picada, la mitad del huevo y una de las lonchas de jamón cocido troceadas.
- Ponemos un poco más de bechamel.
- Formamos otra capa igual que la anterior (pasta, carne…).
- Cubrimos con el resto de la bechamel.
- Doramos unos trocitos de pan en una sartén con un chorrito de aceite. Les damos sabor con hierbas aromáticas secas.
- Ponemos ese pan tostado en la superficie de nuestra lasaña.
- Servimos inmediatamente o conservamos en el frigorífico hasta el momento de servir.
Más información – Salsa bechamel
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