Patatas confitadas, sabrosa guarnición

Preparación

1. Lavamos las patatas y las secamos. Puedes confitarlas con su propia piel, ya que las enanas son unas patatas con una cáscara fina y suave. De esa manera, soltarán menos almidón y el aceite del confitado será más limpio.

2. En una cacerola amplia vertemos tal cantidad de aceite que nos permita cubrir las patatas. Ponemos el aceite a calentar a fuego medio hasta que llegue a unos 60 grados. Cuando notemos que está caliente y que burbujea un poco, echamos las patatas y los granos de pimienta. Debemos mantener una temperatura estable sin que llegue al punto de ebullición.

3. Mantenemos las patatas en la cacerola entre 45-60 minutos, comprobando el punto de cocción con un cuchillo de punta fina. Cuando retiremos las patatas del fuego, las mantenemos en su propio aceite junto con las hierbas hasta servirlas, momento en el que las salaremos.