Los quiches son esos pasteles salados que podemos preparar para los niños en muy poco tiempo. Si ya tenemos la masa para colocar en su base, solo hay que preparar el relleno, colocarlo encima de la masa y hornear. Entre sus ingredientes tenemos verdura, queso, nata y huevos que serán los ingredientes principales para que podamos preparar este delicioso quiche. En mi caso lo he preparado con masa de hojaldre que también queda igual de práctico que la pasta brisa.
- Una lámina de masa de hojaldre
- Media cebolla pequeña
- 150 g de calabacín
- 200 ml de nata para montar
- 2 huevos
- 60 g de beicon ahumando
- Un puñado de queso rallado a los 3 quesos
- Dos cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta
- Cogemos la cebolla y el calabacín y lo cortamos en trocitos muy pequeños. Tiene que quedar pequeñito para que no se encuentren trocitos cuando esté hecho el pastel.
- En una sartén echamos dos cucharadas de aceite de oliva y ponemos a calentar los trocitos de verduras. Lo ponemos a freír hasta que esté todo blando.
- Preparamos la masa del hojaldre y la extendemos en la tartera. Si queremos engrasar un poco el molde con mantequilla podremos hacerlo. Para que no sube el hojaldre al cocerse en el horno pincharemos por toda la masa con un tenedor. Lo metemos en el horno a 200° durante 10 minutos.
- En un cuenco hondo echamos los 200 ml de nata, los dos huevos y salpimentamos. Lo batimos todo muy bien.
- Echamos en el cuenco la verdura hecha, el queso rallado y el beicon en trocitos pequeños. Volvemos a batirlo todo bien.
- Cuando tengamos horneado el hojaldre volcamos toda la mezcla dentro de la tartera y lo volvemos a meter en el horno otros 15-20 minutos hasta que cuaje.
- Una vez hecha la dejamos enfriar y ya podremos desmoldar para degustarla. También se puede tomar caliente.
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