Hacer una quiche en casa además de ser una idea de lo más socorrida para cualquier cena, es una forma rápida y sencilla de hacer un plato completo y riquísimo. La quiche en si es una especie de tarta salada en la que puedes añadir cualquier tipo de ingrediente. Hoy la hemos preparado de jamón y queso, ingredientes muy socorridos que todos solemos tener en casa y que a los peques les encantan.

Se prepara al horno, por lo que no tiene nada de aceite y queda muy jugosa y deliciosa.

Quiche de jamón y queso

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Hacer una quiche en casa además de ser una idea de lo más socorrida para cualquier cena, es una forma rápida y sencilla de hacer un plato completo y que gusta a todo el mundo

Ángela

Cocina: tradicional
Tipo de receta: pasta
Raciones: 8

Tiempo total:

Ingredientes

1 base fresca de masa quebrada
200 g de jamón york
250 g de queso rallado
Media cebolla partida en trocitos
150 ml de nata líquida
3 huevos
Sal
Pimienta
Nuez moscada
Unas rodajas de tomate para decorar

Preparación

Pon a precalentar el horno a 180 grados. Mientras, extiende la masa quebrada sobre el molde en el que vayas a hacer la quiche. Procura que sea un molde redondo de tamaño mediano. Forra el molde con la masa, y pínchala con un tenedor para que no se creen burbujas cuando esté en el horno. Una vez la tengas, métela en el horno y deja que se haga durante unos 15 minutos a 180 grados.
En una sartén ponemos un poco de aceite de oliva virgen extra, y una vez que el aceite está caliente, añadimos la cebolla. Dejamos que se poche en la sartén. Una vez lista, la dejamos reservada.
Mientras hacemos la masa en el horno, en un recipiente mezclamos los huevos, el jamón cocido en trocitos, el queso rallado, la cebolla ya cocinada, y la nata líquida. Le ponemos la sal, y la pimienta y mezclamos todo.
Sacamos la masa quebrada del horno y le añadimos por encima el relleno que hemos preparado. Y la decoramos por encima con unas rodajas de tomate y un poco más de queso rallado.
Volvemos a hornear todo durante unos 20 minutos hasta que la mezcla coja consistencia y un ligero color dorado.
Una vez que tenemos la quiche lista, la dejamos enfriar, y estará lista para comer.