Volvemos a proponeros una receta de risotto. Si el arroz es uno de los platos preferidos por los niños, no lo es menos el acompañante de este cremoso risotto, el queso. Cuatro quesos a nuestra elección darán un sabor más o menos potente a este risotto.
Es una receta fácil que nos servirá como primer plato o como guarnición, o incluso como plato único si le añadimos algo de verdura, pollo o pescado.
Ingredientes: Dos vasos de arroz redondo, 4 quesos (gorgonzola, roquefort, gruyere, parmesano, ricotta, etc.), caldo de pollo, vino blanco, aceite de oliva virgen extra, cebolla, sal y pimienta
Preparación: Picamos la cebolla y la rehogamos en una cacerola con un poco de sal. Una vez hecha, añadimos el arroz y lo doramos durante un par de minutos. Incorporamos un vaso de vino blanco y subimos el fuego para que rebaje. Cuando el vino esté evaporado, volvemos a bajar el fuego empezamos a añadir el caldo poco a poco para que vaya cociendo el arroz cuidando que no se pegue. Cuando el arroz está casi cocinado añadimos los quesos y movemos para que se fundan junto al arroz. Rectificamos de sal y pimienta y apartamos del fuego.
Imagen: Tuttipasta
2 comentarios, deja el tuyo
Cuanta es la cantidad aproximada de cada queso con respecto al arroz (gramos de queso por gramos de arroz)?
Hola Gisela. El queso en este risotto no sólo aporta sabor, sino también textura. En este caso, el queso aporta cremosidad al plato, como lo haría la mantequilla o el parmesano en un risotto convencional. Esto se llama mantecare en italiano. Una vez esté tierno el arroz, juega con la cantidad de quesos a añadir hasta darle el espesor y cremosidad propia del risotto al plato (una textura melosa, untuosa pero no pastosa) Según la cantidad de grasa o la sequedad de los quesos elegidos, así deberás de echar. También debes de tener en cuenta el sabor final del risotto. Si te gusta un sabor más potente, añade más roquefort, por ejemplo, que ricotta o requesón, que es más suave.