Para disfrutar de esta dulce crema de leche condensada (que muy parecida a la pastelera podemos emplear en postres y repostería), no es necesario que viajemos a Perú (o a su capital, Lima), cuna de este postre. En casita, tan a gusto, podemos refrescarnos y alimentarnos con este suspiro que se remata además con un merengue enriquecido con vino dulce u otro licor (¡sólo si no lo comen los niños!). La base del suspiro se hace con leche condensada y yemas y se aromatiza con vainilla y canela. ¿Añadirías algo más?
Suspiro de limeña
Disfruta de este dulce crema de leche condensada con esta receta. Es muy fácil de hacer y está buenísimo
Imagen: Perudelight