El bacalao siempre es bienvenido en Semana Santa y en cualquier época del año. En buñuelos, con nata o con habitas, está delicioso, y más en fechas señaladas, donde los mercados se llenan de bacalaos en salazón.
No podíamos olvidarnos de las tortillitas, que pequeñitas, crujientes y recién sacadas de la sartén, se comen con la mano y están deliciosas. Para los niños, una manera ideal de comer pescado.