Puedes hacer mucha cantidad y congelar la que sobre, porque se conserva bien durante mucho tiempo gracias al azúcar que actúa como un perfecto conservante.
Para prepararla necesitarás un kilo de cebollas, 2 cucharadas soperas de azúcar moreno, 7 cucharadas de aceite de oliva y una cucharada de vinagre.
Para prepararla pela y corta la cebolla en tiras muy finas. Deja pochar la cebolla en una sartén con un buen chorro de aceite de oliva a fuego medio, removiendo sin parar para que no se queme. Si ves que hace falta más aceite, ve añadiendo un poco más, poco a poco.
Cuando vemos que la cebolla está tierna, añade el azúcar y el vinagre, y remueve hasta que se caramelice. (unos 20 minutos) a fuego bajo. Después escurre el aceite con la ayuda de un colador.
Sé el primero en comentar