Hace tanto calor que lo que se apetece es comida fresquita. Esta receta de sopa fría es muy sencilla y barata, sólo necesitas una lechuga y leche, aunque puedes sustituir la mitad de la leche por caldo de ave. Puedes incluso congelarla si haces mucha cantidad. Para servirla, ¿qué tal unos picatostes de pan, un poco de jamón picadito?
Sopa fría de lechuga
¿Habías probado una sopa fría de lechuga? Te sorprenderá lo fácil que se prepara y lo buena que está
Imagen: dayliciousbites