Hoy os mostramos cómo conservar las hojas de albahaca en sal y aceite. Utilizaremos únicamente esos ingredientes y obtendremos unas hojas llenas de sabor y color que podremos utilizar para realizar salsas, dar sabor a nuestras ensaladas y para enriquecer nuestras pizzas en cualquier época del año.
La albahaca se utiliza sobre todo para realizar pesto genovés. Si por algún motivo tenéis muchas hojas, pensad en la receta de hoy porque es una forma sencillísima de conservarla.
Lavad y secad delicadamente las hojas de albahaca. A partir de ahí solo nos quedará divertirnos formando capas.
- 100 g de hojas de albahaca
- 100 g de sal gruesa
- 400 g de aceite de oliva virgen (peso aproximado)
- Lavamos y secamos bien las hojas de albahaca. Para secarlas podemos utilizar papel absorbente, servilletas de papel o un paño de cocina limpio.
- Preparamos un tarro de cristal limpio.
- Colocamos una primera capa de albahaca en la base del vaso.
- Ponemos sal gruesa sobre las hojas. Ponemos otra capa de hojas y volvemos a poner sal.
- Continuamos haciendo capas.
- Aplastamos las capas que hemos ido formando con una cuchara.
- Continuamos con los estratos.
- Cuando nuestro bote esté prácticamente lleno echamos un chorrito de aceite.
- Si lo consideramos necesario seguimos haciendo capas.
- Terminamos de cubrirlo con sal gruesa.
- Echamos aceite de oliva hasta llenar el bote.
Lo mejor es conservar el tarro en del frigorífico.
Si utilizamos alguna hoja para realizar salsas, os aconsejo salar nuestra salsa al final, y solo si lo consideramos necesario.
Más información – Pesto genovés
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