No sé si por la foto podéis apreciar lo esponjoso que es este bizcocho. Es un espectáculo. Lleva huevos, nata, y la piel rallada de un limón, ingredientes muy básicos con los que obtenemos un resultado excepcional.
Sin mantequilla ni aceite porque la nata es la que aporta la materia grasa. En la superficie pondremos un poco de azúcar que creará una delicada costra crujiente. Animaos a probarlo porque os va a encantar.
Más información – Cómo aromatizar azúcar